Con el fin de garantizar la calidad de vida a los trabajadores, Geovanna Bañuelos propone elevar del 35 al 80% el promedio del sueldo básico de las pensiones por invalidez total o permanente.
Mediante una iniciativa que modifica el artículo 141 de la Ley del Seguro Social; y el artículo 121 de la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, la coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo sostiene que la pensión actual por invalidez es insuficiente para cubrir las necesidades básicas de los pensionados.
Al fundamentar la propuesta, Geovanna Bañuelos mencionó que el incremento del porcentaje de las pensiones por invalidez es necesario para garantizar una mayor equidad y justicia social.
La legisladora por Zacatecas recordó que la seguridad social, también conocida como previsión social, es un sistema de protección que busca garantizar el bienestar de los individuos y de sus familias ante diversas contingencias de la vida al garantizar una amplia gama de servicios como atención médica, pensiones, maternidad, accidentes laborales y vejez.
En el caso de la pensión por invalidez, dijo que esta es de suma importancia porque contribuye al bienestar y la calidad de vida de las personas con discapacidad al proporcionarles un ingreso constante y digno. Esto les permite mantener su autonomía, así como acceder a los recursos y servicios necesarios para satisfacer sus necesidades básicas.
“Desafortunadamente, en nuestro país el monto de las pensiones es injusto debido a que no se toma en consideración las necesidades y particularidades de las personas, por mencionar algunas; médico, cuidadores, atenciones y cuidados derivados de la incapacidad”, lamentó Geovanna Bañuelos.
Lo anterior, se debe a que desde su publicación en el Diario Oficial de la Federación, en 1995, la Ley del Seguro Social siempre ha establecido que la cuantía de la pensión por invalidez será igual al 35% del promedio de lo devengado, lo mismo en el caso de la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, que desde su publicación en 2007 tiene el mismo porcentaje respecto a la cuantía.
Geovanna Bañuelos subrayó que el actual porcentaje está muy por debajo de lo que las personas necesitan para subsistir; “ejemplo de ello es el de una ciudadana zacatecana que sufre de una discapacidad y está pensionada por invalidez desde el 2015, por lo que solo recibe un tercio de su salario, lo que sin duda afecta la posibilidad de valerse por sí misma”.
“Por su discapacidad, requiere de una cama hospitalaria, un concentrador de alto flujo, una silla de ruedas eléctrica, un concentrador de oxígeno portátil, así como de calentadores y ventiladores que le ayudan a regular la temperatura”, detalló la líder parlamentaria.
Además, necesita de un concentrador de oxígeno eléctrico, el cual hace que el cobro del consumo de luz sea de hasta 4 mil pesos mensuales. Aunado a ello, debe pagar medicamentos que ascienden a 10 mil pesos mensuales y aunque algunos son proporcionados por el Seguro Social, estos son sumamente costosos. Habrá que agregar el costo de las consultas a los especialistas médicos para recibir tratamiento.
“Es de suma importancia que el sustento económico aumente para las personas trabajadoras que sufren de una incapacidad permanente o total, con el objetivo de que los trabajadores puedan cubrir los gastos básicos de vida, como alimentos, vivienda, atención médica y otras necesidades diarias”, concluyó Geovanna Bañuelos.